miércoles, 7 de mayo de 2008

Historia del Barings Bank




“El Barings Bank (Banco Barings) fue fundado en 1762 con el nombre de 'John and Francis Baring Company' por Sir Francis Baring. En 1806 su hijo Alexander Baring entró en la empresa y ellos cambiaron el nombre de la misma por Baring Brothers & Co., y la fusionaron con las oficinas de Londres de Hope & Co., donde Alexander trabajó con Henry Hope.

Barings tuvo una larga y documentada historia. En 1802, ayudó a financiar la adquisición de la Luisiana, a pesar de que Gran Bretaña estaba en guerra con Francia, y que la venta tenía como efecto la financiación del esfuerzo de guerra de Napoleón. Técnicamente los Estados Unidos no adquirieron la Luisiana de Napoleón. La Luisiana fue adquirida a la Baring Brothers and Hope & Co.. El pago de la adquisición fue hecho en bonos de los Estados Unidos, los cuales Napoleón vendió a Barings con un descuento de 87 1/2 por cada $100. Como resultado, Napoleón recibió solamente $8,831,250 en metálico por la Luisiana. Alexander Baring, trabajando para Hope & Co., conferenció con el Director del Tesoro Público francés François Barbé-Marbois en París, su ida a los Estados Unidos para recoger los bonos y llevárselos a Francia.

Posteriores atrevidos esfuerzos en seguros puso a la empresa en serio problema por sobreexposición a la deuda argentina y uruguaya, y el banco tuvo que ser rescatado por un consorcio organizado por el gobernador del Banco de Inglaterra, William Lidderdale, en el Pánico de 1890. Mientras que la recuperación de este incidente fue rápida, destruyó la antigua baladronada de la compañía.

Su nuevo, moderado comportamiento lo hizo un más apropiado representante de la clase dirigente británica, y la compañía estableció vínculos con el rey Jorge V, comenzando una relación estrecha con la monarquía británica que perduraría hasta el colapso de Barings (Diana, princesa de Gales, fue la bisnieta de uno de los integrantes de la familia Baring). Los descendientes de las primeras cinco ramas masculinas de la familia Baring fueron todos nombrados para la nobleza con los títulos de Lord Revelstoke, Conde de Northbrook, Lord Ashburton, Lord Howick de Glendale y Conde de Cromer. La moderación de la compañía durante este período le costaría su preeminencia en el mundo de las finanzas, pero después produciría dividendos cuando su negativa de dar una oportunidad de financiar la recuperación de Alemania de la Primera Guerra Mundial le evitó las dolorosas pérdidas experimentadas por otros bancos británicos al principio de la Gran Depresión.” http://es.wikipedia.org/

El Barings Bank tras los sucesos mencionados anteriormente se mostraba como un banco con alta solvencia y capacidad dentro del mercado de las finanzas; por ello, era evidente el crecimiento al cuál iba a estar condicionado para mantener su posición en el mercado. Sin embargo, lo sorprendente es como una pequeña sucursal de la empresa en Singapur pudo llevar a la quiebra a una empresa que parecía estar bien encomienda. A continuación, se desarrollará el caso del empleado causante de la quiebra del Barings Bank.

“El empleado en cuestión era Nick Leeson, que tras pasar por diferentes trabajos en varios bancos había acabado en el Barings. Tras una breve temporada en la oficina Jakarta, donde tuvo actuación brillante, fue nombrado General Manager de la nueva oficina en Singapur para operar en el mercado de futuros de la bolsa de Singapur.En esta oficina se encargó de seleccionar sus propios subordinados y no respondía anteaningún superior local. En un principio las cosas le fueron bien, consiguiendo grandes beneficios para el banco. Sus gestiones llegaron a reportar el 10% del total de los beneficios del banco, lo cual le reportó un gran prestigio dentro del banco.Sin embargo la suerte cambió y empezó a usar una cuenta que usaba el banco para corregir errores internos para esconder sus propias pérdidas. Aunque lo normal hubiera sido que el jefe de inversión (que debería actuar como supervisor) no fuera a su vez un corredor, los gestores del banco permitieron que Nick ocupara ambos cargos a la vez, por lo que actuaba sin ninguna supervisión local.

Para finales del 1992 las perdidas de Leeson excedían los 2 millones de libras, sin embargo para intentar cubrirlas cada vez aumentaba más su apuesta, pero con escasa fortuna, por lo que las pérdidas llegaron a ser de 208 millones a finales del 1994, pero los gestores del banco aún las desconocían.

El principio del fin ocurriría el 16 de Enero del 1995, cuando Leeson puso una orden de futuros en los mercados de Singapur y Tokyo, básicamente apostando que la bolsa japonesa no se movería de manera repentina en los próximos días. Sin embargo la mañana del día 17 sucedió el terremoto de Kobe, lo cual hundió los mercados asiáticos y con ellos la apuesta de Leeson. En un intento un tanto desesperado Leeson siguió con su estrategia de asumir más riesgo, y realizó una serie de inversiones apostando que el índice Nikkei de Tokyo se recuperaría de manera rápida, lo cual no ocurrió y aún agravó más su situación.

Consciente que la situación ya no tenía solución, Leeson dejó un nota diciendo "Lo siento" y huyó el 23 de febrero. Las pérdidas alcanzaron los 827 millones de libras, dos veces la cantidad de dinero que el banco tenía disponible para inversión bursátil, y el banco fue declarado en quiebra el 26 de febrero.

Como corredor de bolsa Leeson tuvo muy mala suerte sin embargo su actuación no es del todo extraña, especular sin conocimiento de los superiores para recuperar pérdidas es una cosa que pasa de tanto en tanto en este tipo de bancos. Cuando el empleado que lo hace es descubierto normalmente es despedido, pero ni él ni el banco están interesados en airear el asunto, sin embargo en su caso era inevitable ya que la bancarrota del banco no se podía ocultar y esto es lo que hizo su caso especial.Leeson fue detenido el 2 de Marzo y siendo acusado de fraude por engañar a sus superiores ocultándoles el riesgo de sus actividades así como el volumen de sus pérdidas. Aunque muchos expertos responsabilizan igualmente al deficiente sistema de auditoría interna y de gestión de riesgo del banco. Así las autoridades de Singapur afirmaron que el management del banco debería haber conocido el volumen de las pérdidas escondidas en la cuenta de errores.


Otro hecho al que se puede achacar esta falta de control fue que el banco se encontraba en un proceso de reorganización interna tras haber fusionado varias de sus divisiones. Este entorno fue aprovechado por Leeson que además de ser un mentiroso muy bueno, según el mismo reconoce en su biografía, era experto en explotar las inseguridades de las personas. De esta manera consiguió que la gente en la sede de Londres no se atrevieran a hacerle según que preguntas ante el riesgo de quedar como estúpidos, y más ante él que era toda una celebridad en el banco.

Leeson fue sentenciado a 6 años y medio de cárcel en Singapur aunque salió antes tras diagnosticársele un cáncer de colón que finalmente superó. (...)Por lo que respecta al Barings, fue comprado por 1 libra por el banco holandés ING que a cambio se hizo cargo de todas su responsabilidades” http://www.cabovolo.com/

Para finalizar, es importante mencionar que durante su permanencia en la cárcel, Nick Leeson redactó su biografía “Rogue Trader” en el cuál narra su historia y las maniobras que hizo en el mundo de las finanzas, posteriormente su biografía fue la base en la producción de una película con el mismo nombre, traducida al español “El gran Farol”. Les dejamos un link de la Revista “The Econqmist” del 3 de Julio de 1999, donde habla sobre la película “Rogue Trader” junto con el link del trailer.